Adjuntamos un enlace al diario El Mundo en el que se habla de un edificio de mínimo consumo de energía (EECN). Un punto especialmente interesante es que se trata de un edificio de vivienda protegida cuyos costes, limitados por la naturaleza de la promoción, han tenido un aumento de un 5% solamente. La arquitectura bioclimática y sostenible no tiene por qué ser cara. En caso contrario no sería sostenible.
Anima pensar que hay promotores que apuestan por este tipo de edificio y que hay compradores (el 70% de la promoción está ya vendida, en estos tiempos difíciles) que valoran estas viviendas.
http://www.elmundo.es/economia/2014/05/06/5368920022601de0568b456d.html
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